Una encuesta bastante interesante.
Al hilo de una noticia que publicamos en este blog hace un par de días, os traslado una encuesta realizada por el Diario La Razón sobre la educación de nuestros hijos que deja respuestas tan sorprendentes como la siguiente:
La educación de los jóvenes requiere tiempo, pero no siempre se les dedica la atención que merecen. Los españoles creen que las largas jornadas laborales o simplemente un reparto inapropiado del tiempo que se dedica al trabajo juega en su contra para cumplir adecuadamente con su papel de educadores. Así lo constata una encuesta de NC Report para LA RAZÓN, que revela que el 69,9% de los españoles opina que los padres de hoy están más pendientes de sus trabajos que de la educación de sus hijos. Y en esto coinciden todos los segmentos de edad, e incluso crece el porcentaje entre los más adentrados en años. De ahí que un porcentaje idéntico opine que los padres deberían comprometerse más en atender esta obligación, sobre todo si pensamos que la familia es un punto de referencia esencial para un niño a la hora de formar su personalidad y socializarse.
También se preguntó sobre la posibilidad de dar mayor autoridad a los profesores, y la respuesta fue esta:
En lo que parece que están de acuerdo los ciudadanos es en la necesidad de reforzar la autoridad de los profesores, una petición insistente y antigua del sector educativo que parece haber escuchado el Gobierno de Esperanza Aguirre al proponer una ley madrileña que les dé rango de autoridad pública y que prevé penas de cárcel para los que agreden a los docentes.
El 67,2 por ciento de los españoles es partidario de que se refuerce la autoridad del docente, especialmente los que se encuentran en la treintena, aunque aún hay casi un 30 por ciento que se opone. La idea tiene a los jóvenes como sus mayores opositores, ya que el 49,4 por ciento de los españoles entre 18 y 29 años cree que no es necesario tomar ninguna iniciativa en este sentido.
Además de estas, hay otras cuestiones interesantes, aquí el resto de la noticia.